La presunta red que, utilizando medios electrónicos para cometer delitos, así como al robo de identidad de ciudadanos de Estados Unidos, era encabezada por Sucre Rafael Rodríguez Ortiz (Darimán y/o Dari).
Esa persona, que es destacada como el principal integrante de la presunta banda, se le atribuye el despojo de los fondos de pensiones a cientos de ciudadanos estadounidenses, a través de una estructura que operaba desde Santiago mediante negocios de call centers (centros de llamadas).
