La playa Boca Chica estuvo abarrotada de bañistas de diferentes localidades que visitaron este balneario para combatir el calor y compartir un rato entre amigos y familiares durante la tarde de este Sábado Santo, aunque sin respetar el distanciamiento físico.
Los bañistas disfrutaban de las aguas de la cristalina playa, mientras que otros tomaban bebidas alcohólicas y comían debajo de las sombrillas de los diferentes negocios.
A pesar de la multitud y de los llamados de atención de los organismos de seguridad, muy pocos ciudadanos utilizaban las mascarillas, que son otras de las medidas recomendadas por las autoridades para prevenir el contagio del COVID-19 y evitar el aumento de los casos luego de que pase la Semana Santa.
En la playa Boca Chica las autoridades de la Defensa Civil instalaron tres hospitales móviles para cualquier emergencia que pudiera surgir. En estos centros hasta las 3:40 de la tarde le habían brindado servicio a 36 pacientes, la mayoría por dolores de cabeza e insolación, de acuerdo a las informaciones ofrecida por la doctora Yohanna Leyba, encargada del Departamento Médico de la Defensa Civil a nivel nacional.
Algunas personas se reían o hacían un chiste cuando el equipo de Diario Libre le preguntaba por las mascarillas. “Aquí no hay coronavirus”, “No va a venir uno a la playa a bañarse con una mascarilla puesta”, “la brisa de la playa se lleva to’ eso”, expresaban y a seguidas lanzaban una carcajada.
