Una reciente encuesta arrojó que 2 de cada 5 personas revelaron como su salud mental ha declinado desde el brote de COVID-19, principalmente por ansiedad, estrés y preocupación por perder el trabajo. (Arte de portada /CSS Panamá)
El estudio realizado por realizada por Qualtrics arrojó también que los padres reportan tener más ansiedad, especialmente si empezaron a acompañar los estudios de sus hijos en casa.
Los encuestados reportaron estar:
-Más exhaustos emocionalmente -Más tristes en la vida diaria -Más irritables -Más confundidos y más enojados -Con más insomnio y con más culpa
Ante esta realidad, un grupo de terapeutas especializados en distintas áreas de la salud mental está ofreciendo sus servicios de forma gratuita (para una primera sesión) en respuesta a las preocupantes cifras del declive de la salud mental tras el brote del COVID-19.
Los desastres a gran escala casi siempre se acompañan de incrementos en depresión, estrés postraumático, desorden del uso de sustancias, diversos desórdenes mentales y comportamentales, violencia doméstica y abuso infantil, según plantea una investigación reciente sobre las consecuencias del COVID-19 y el distanciamiento social en la salud mental de las personas.
