Recesión destruye economías, inflación destruye hogares….
La situación me recuerda una escena de una de mis películas favoritas de todos los tiempos: La princesa prometida. Es una batalla de ingenio entre el apuesto hombre de negro y un secuestrador siciliano
¿El juego? Intenta predecir qué copa de vino ha sido envenenada.
"¿Dónde está el veneno?" pregunta el hombre de negro, ubicando una copa de vino frente a él y otra frente al siciliano. "La batalla de ingenio ha comenzado. Termina cuando tú decides y ambos bebemos, y averiguamos quién tiene razón... y quién está muerto".
El siciliano se lanza a un vertiginoso desglose lógico de la situación (cotorra): el hombre de negro es fuerte y podría haber envenenado su propia copa, pensando que podría sobrevivir, "¡así que claramente no puedo elegir el vino que tienes delante!" Luego responde que su adversario también es inteligente y nunca envenenaría su propia copa, "¡así que claramente no puedo elegir el vino que tengo delante!"
El siciliano finalmente elige una copa, ambos beben y el hombre de negro le dice que eligió mal. ¡El siciliano anuncia triunfalmente que en secreto cambió las copas y evitó el veneno! En medio del ataque de risa, muere. Resulta que ambas copas estaban envenenadas.
Creo que la mayoría de las personas se equivocan cuando piensan que dirigir un gobierno en este momento es fácil, puede sentirse un poco como nuestro pobre y condenado siciliano: ¿Va a centrar sus esfuerzos en vencer la inflación, incluso si eso significa una recesión que cierra negocios y deja a millones de personas sin trabajo?? ¿O intentará evitar una recesión a toda costa, incluso si eso significa niveles de vida devastados por los altos costos de la inflación y una moneda arruinada? No hay elección que no implique graves dolores económicos…. Y políticos.
El pasado gobierno de Reino Unido cayo en 2 semanas luego de un presupuesto complementario diseñado por el hombre que le planifica a ¨mantequilla¨ y ya está fuera del gobierno, la situación económica mundial también jugó un papel importante en los acontecimientos recientes, nadie tiene paciencia para planes creativos, pero los fundamentos económicos crean dos escenarios horribles.
Apretar la economía creando desempleos es malo…excepto que la otra copa también corre el riesgo de algo bastante terrible. Evitar o suavizar una recesión generalmente significa inyectar dinero en la economía. De esa manera, un gobierno mantiene el flujo de dinero a través del sistema hacia las personas y las empresas. Esto anima a las personas, las empresas y los bancos a seguir gastando, invirtiendo, contratando y creciendo. Pero todo eso puede empeorar la inflación, creando una inelasticidad en los precios que nadie ni siquiera la frente de Jack Veneno aguantaría.
Si se produce una espiral inflacionaria, puede destruir totalmente una moneda y una economía. También destruye vidas: ¿Imagina que todos tus ahorros se esfumen? (eso solo incluye a las personas que tienen ahorros, ok) ¿Imaginas que estás pagando $2,000?00 por una taza de café? ¿Imaginas que trabajas todo el día y apenas ganas lo suficiente para pagar el almuerzo? (o sea que estas a dieta por necesidad no por placer) Te imaginas un mundo donde los viejos no puedan comprar tarjetas de llamadas a las menores o peor aún ¿que las chapeadoras se tengan que poner a trabajar?
Esta espiral inflacionaria demoledora ha ocurrido en países como Brasil, donde causó décadas de terrible dolor, del cual la economía del país aún no se ha recuperado por completo. Seguramente un gobierno no puede elegir esa copa. Todavía existe la gran esperanza del llamado aterrizaje suave: la idea de que elevar las tasas de interés ahora podría calmar la inflación lo suficiente como para que la elección no sea necesaria y nuestro gobierno pueda evitar tener que tomar una decisión económica tan inconcebible, pero en un país donde hay miles de bancas de apuestas y mantequilla sigue ocupando titulares todo, absolutamente todo es posible.
Angel Lockward Cruz
